La Fortaleza de los Frangipane en Tolfa

Sobre el punto más alto del espléndido burgo medieval de Tolfa, se encuentran las ruinas del Castillo de la Rocca, construido por voluntad de la familia Frangipane, que se instaló en el territorio de Tolfa en el siglo XIV d.C.

La via de la Rocca, el recorrido para llegar a la cima de la colina, completamente en pendiente, es particularmente sugestivo. A través de las callejuelas del burgo antiguo de Tolfa, llegaréis de manera agradable a la cumbre, rodeados de graciosos jardines de las casas cercanas.

Os podemos garantizar que una vez llegados a la cima, el magnífico panorama que se os abrirá delante, ¡borrará cualquier atisbo de cansancio y sudor de vuestra frente!

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Via della Rocca, la característica callejuela que lleva hacia las ruinas del castillo, se llevó el primer premio en el concurso para la elección de la calle más bonita del centro histórico en 2014, organizado por el Ayuntamiento de Tolfa.

UN POCO DE HISTORIA

La historia de la Fortaleza está inevitablemente relacionada con la historia de Tolfa. Inicialmente pensada como castillo morada de la familia Frangipane, a lo largo del tiempo, gracias a su posición dominante, ha asumido tanto la función de torre de control, como de polígono de tiro, llegando a albergar incluso un pequeño cementerio durante el siglo XIX.

Tolfa se expandió alrededor de una fortaleza en el año 1000. Por un acto de submisión a Corneto, (actual Tarquinia) parece que el castillo y el burgo circunstante se llamaran Tolfavecchia o Tulfa Veteris, para distinguirse de otro castillo no muy lejano que tenía por nombre Tolfanova. En 1448, pasó al ramo de la antigua familia de los Frangipane, quienes restructuraron el castillo.

En 1461, tras el descubrimiento de las limítrofes canteras de alumbre, el territorio de Tolfa se convirtió en objeto de fuertes disputas. En 1469 el Papa Pablo II adquirió todo el feudo y desde aquel momento, los castellanos pasaron a ser de nominación pontifícia. A principios del siglo XVI, después de que un noble de Siena de nombre Agostino Chigi la despojara de las artillerias (trasladadas a Porto Ercole y Talamone), cesó también la manutención del castillo, con su consiguiente decadencia.

Ultimo bastión de defensa durante muchísimos siglos, la Fortaleza consiguió proteger al pueblo de Tolfa también del ejército napoleónico. Resistió, de hecho, a la invasión de los franceses en 1798, representando el último baluarte defensivo hasta el 14 de marzo de 1799 cuando se destruyó definitivamente, juntó con la gran parte de las casas medievales del pueblo. Encerrados entre las ruinas del viejo castillo, los habitantes de Tolfa que se rebelaron contra los invasores franceses eran llamados briganti (bandidos).

A día de hoy, se presenta como una típica fortaleza medieval. Del castillo original queda solo el torreón cilíndrico, protegido en el interior por murallas almenadas, y parte del cuerpo central que se hipotiza que tenía al menos tres pisos de altura. Se reconoce la presencia de un semisótano con aspilleras, un gran salón central en la planta baja, cubierto y de crucería, y una planta superior, deducible de unas marcas en la parte superior de la muralla externa.